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¡Descubre el secreto de tu piel! Identifica tu tipo de piel y transforma tu rutina de cuidado

Hoy vamos a hablar de tu tipo de piel. Porque conocer tu tipo de piel ayudará a preparar el escenario para cualquier producto en cualquier régimen de cuidado. Nuestra piel se ve afectada por un montón de factores externos como el medio ambiente, la radiación solar, la polución, el clima, así como obviamente por los productos que aplicamos, pero también cosas internas como nuestros genes y nuestro estilo de vida y alimentación. ¿Realmente sabes cual es tú tipo de piel? Descubre cual es el tuyo y aprende a elegir que productos son los indicados para ti.


Te hablare sobre los cinco tipos principales de piel que tenemos, las características de cada tipo de piel y por qué podemos ser más de un tipo. Te daré dos pruebas sencillas que puedes probar en casa para saber cuál eres y qué productos buscar que se adapten mejor a tu propia piel. Así que toma un poco de té, toma un poco de café, escribe tu correo electrónico, presiona el botón de suscripción y pongámonos manos a la obra.


Entonces, ¿Cuántos tipos de piel diferentes hay?, en realidad hay tantos como personas en el mundo, porque todos somos personas únicas con diferentes tipos de piel, ¿verdad? pero por el bien de la cordura, generalmente caemos en cinco categorías diferentes, bueno cinco y medio. Así que hay piel normal, grasa, seca, mixta, sensible y otra categoría que podríamos considera son los tipos de piel madura. Pero esta es la verdad, no todos caemos en una categoría específica, por lo que podemos confundirnos muchas veces, y se que a ti te pasa lo mismo en muchas ocasiones. Y eso es porque la piel cambia con diferentes factores, que veremos en un momento. También puedes pensar en la piel como un signo zodiacal, solo porque somos un signo zodiacal, no significa que todos seamos clones el uno del otro, algo similar es nuestro tipo de piel, es como si pudieras ser una combinación de varios, pero principalmente puedes ser una combinación más aceitosa o una combinación más seca, o puedes ser muy, muy aceitosa o muy, muy seca. Hay como diferentes espectros dentro de cada categoría. Y probablemente por eso encontrarás tantas marcas con tantos productos para el cuidado de la piel, todos proponiendo lo mismo. Como esto es para piel seca, o esto para piel grasa y luego dices, ¿entonces por qué hay tantos productos? Es porque todos estamos en un lugar diferente en el espectro.

Basándonos en esto, lo que todos tenemos en común es una cosa y es el aceite en la cara, el cuero cabelludo y el cuerpo, la única diferencia es la cantidad de aceite que produce, por lo que hay diferentes tipos de piel. Pero antes de comenzar, qué es la piel deshidratada.


¿Piel grasa o deshidratada?

Primero hablemos de la piel grasa y la piel deshidratada porque esas dos cosas son completamente diferentes. La piel deshidratada significa que sus queratinocitos o las células de su piel carecen de agua. La piel grasa tiene más que ver con la producción de sebo de las glándulas sebáceas. Por lo tanto, podrías tener la piel grasa y deshidratada, lo que significa que carece de agua. El aceite es lo que protege la superficie de la piel, mantiene la pérdida de agua al mínimo para evitar la deshidratación, pero aún así podrías tener la piel grasa y estar deshidratada. Entonces, hay una diferencia clave entre los dos. El aceite también se conoce como sebo, esto es lo que producen nuestras glándulas sebáceas y es rico en ácidos grasos, triglicéridos y escualeno. Ahora si, después de esta breve introducción comencemos con los tipos de piel.


Piel seca

Si tienes la piel seca, tienes un tipo de piel donde tus glándulas sebáceas producen la menor cantidad de sebo en comparación con todos los demás tipos de piel. El sebo sirve como una barrera para mantener alejados a los invasores ambientales y, al mismo tiempo, se mantiene humedad en la piel. Quienes tienen la piel seca, esa barrera es menos prominente que los tipos de piel normales y grasas, lo que puede provocar parches escamosos y microgrietas debajo de la piel. Y por ello, necesita productos muy nutritivos para compensar la falta de aceites. Sabiendo esto, dentro de la piel seca, hay tres tipos diferentes de sequedad. Hay levemente seco, muy seco y extremadamente seco. Muy bien, entonces el primero está ligeramente seco. Y si tienes este tipo de piel, probablemente sentirás una sensación muy tirante en la piel y sin brillo, todo esto se debe a la poca elasticidad de la piel, incluso si tiras de tu piel y la sueltas, no se recupera, simplemente se desinfla lentamente o solo ves arrugas. Pero esta es una prueba que te mostrare cómo hacer un poco más adelante. Creo que para la mayoría de las personas con piel seca, si no es grave, entrarás en esta categoría, y lo bueno es que es una solución bastante fácil, solo tienes que encontrar una crema hidratante realmente nutritiva.


Si tienes un tipo de piel muy seca, eres más propenso al enrojecimiento, la descamación y la sensibilidad en general, así que es simplemente escalar en los rangos de severidad y picazón. Tu piel en la parte donde está muy seca, tiende a ser, podría ser de un color un poco más oscuro. Si tienes un tipo de piel muy seca, puedes tener picazón, pero no va a ser tanta picazón como, digamos, en una piel extremadamente seca, que en realidad puede provocar una picazón prolongada, así como una intensificación en la descamación. Y debido a que es tan seco, es mucho más susceptible a formar callos en la piel seca. Imagínese como la parte posterior del talón en diferentes partes de su cuerpo o cara. ¿Cómo es eso? Probablemente necesitas ver a su dermatólogo para ese tipo de sequedad.


A los tipos de piel seca les va mejor con cremas más pesadas para formar una capa en la superficie de la piel que evita la pérdida de agua y no tienden a producir mucho aceite, por lo tanto, van a depender más de humectantes más fuertes que imitan los aceites naturales que se encuentran en la piel. Los aceites realmente no hidratan la piel ni la nutren como lo hacen las cremas, si vas a usar un aceite, úsalo después de tu crema. Utiliza un limpiador hidratante evita los limpiadores en gel, requieres más un limpiador cremoso.


Piel grasa

Así que ahora nos mudamos al otro lado del mundo, piel grasa, que es como una bendición y una maldición, a menos que seas normal. Si tienes la piel grasa como yo, verás poros visiblemente grandes porque tienes glándulas sebáceas hiperactivas, que producen sebo que llena los poros. Y, por lo tanto, en realidad es más propenso a cosas como el acné y los brotes porque son más grandes. Al decir eso, no tomes esto como algo malo porque eso solo significa que tu cuerpo y tu rostro simplemente están haciendo un gran trabajo al hidratarse y así, no lo deja escamoso y seco. Pero ¿cómo funciona? el aceite fluye desde la epidermis hasta la superficie de la piel a través de los poros y los folículos pilosos, cuando el cuerpo experimenta una fluctuación en los niveles hormonales, también indica la producción de andrógenos, que es una hormona, para crear más aceites, y si tienes la piel grasa, no solo en zonas concretas es básicamente en toda la cara porque si solo tienes áreas específicas en las que eres grasoso, esto significa que podrías tener más piel mixta, como me pasa a mi, unas zonas grasas y otras secas.


A las personas con piel grasa nos va mejor con formulaciones más ligeras como los humectantes en gel, así como con limpiadores en gel o limpiadores a base de agua, en términos de maquillaje los polvos son excelentes para este tipo de piel porque ayudan a absorber la humedad y el aceite de la piel.


Piel mixta

Si tienes la piel mixta, puedes normalmente tener las mejillas y las orillas del rostro secas y justo alrededor de la zona T, es muy, muy grasosa. Como mencione antes, se puede diferenciar el tipo de piel en la escala de sequedad o la escala aceitosa. Puedes ser más como un aceite pero seco. Aquí es donde entra la combinación porque no está específicamente seco en todas partes, pero tienes una mezcla de ambos mundos. Y, de hecho, aquí es donde entran cosas como el enmascaramiento múltiple. Puedes usar una máscara de barro para las regiones grasas y luego te gusta colocar una máscara diferente para los lugares que necesitan más hidratación y así se equilibra todo. Aquí también es donde encuentras muchos productos equilibrantes para el cuidado de la piel porque están diseñados con ingredientes que ayudan a normalizar tu rostro. Después de lavarte la cara, es muy probable que tus mejillas y cuello ya estén un poco secos y rígidos, mientras tu zona T ya se está poniendo grasosa. Esta es la razón por la cual la piel mixta a menudo se combina con una piel seca, una piel grasa o una piel sensible. Y llegaremos a todo eso y cómo averiguar en cuál estás en un momento porque tenemos dos pruebas simples para ti. Antes de pasar a eso, tenemos sensible. ¿Eres sensible?


Piel sensible

La piel sensible no es genética como las demás, sino más bien que cuando te aplicas productos, tu piel reacciona con mucha facilidad y rapidez. Piénsalo como si fuera tu hermana malhumorada que nunca sabes lo que quiere, nunca se sabe cuando va a ser feliz, cuando no va a ser feliz. Pero luego, cuando encuentras algo realmente bueno, es como, a todos les gustan ingredientes específicos y no les gustan otros ingredientes específicos, con la piel sensible, es así, pero multiplicado por cinco. Entonces, ¿cómo reacciona tu rostro a los diferentes ingredientes? Esto es causado principalmente por una combinación de factores externos e internos, incluidos los cambios de temperatura, ciertos ingredientes en el maquillaje o productos para el cuidado de la piel e incluso el sol. Y en términos internos, obviamente cosas como las fluctuaciones hormonales, el estado nutricional y el estado de salud pueden influenciar ciertas reacciones.


Siento que estas personas tienen los momentos más difíciles con los productos, parece que cualquier cosa que se pongan en la piel, su piel reacciona. Por lo tanto, tienden a ser muy particulares sobre lo que usan y lo hacen mejor con menos productos porque cualquier ingrediente o formulación en particular, realmente puede inclinar la balanza y hacer que reaccionen. Las personas pueden tener una piel sensible desde el principio de los tiempos desde que nacieron o si usas demasiadas cosas y usas muchos productos con fragancias y tintes y te pones muchas cosas en la piel, en realidad puedes sensibilizar tu piel. Por lo tanto, es posible que inicialmente no se nazca con una piel sensible, pero el uso excesivo de productos que usan demasiadas cosas, exponer su piel a demasiadas cosas puede sensibilizarlo. Podrías comenzar con una piel normal o mixta y más adelante en la vida volverse tan sensible debido a todas las cosas que se pone en la piel. Es la cantidad de exposición que recibe tu piel que finalmente después de la centésima exposición o la milésima exposición dice, está bien, ¿sabes qué? Ya he terminado contigo. Me expusiste a tanta fragancia, tantos tintes, tantos ingredientes inactivos para el cuidado de la piel que ahora voy a empezar a reaccionar, me voy a volver reactivo y me voy a sensibilizar. Sin embargo, aquellos con piel sensible saben desde el principio que su piel es reactiva y tratan de evitar todas estas cosas que pueden empeorar aún más su sensibilidad. Así es como llegamos a los probióticos en el cuidado de la piel porque muchas veces las personas con piel sensible tienden a tener una alteración en su microbioma natural de la piel.


Piel normal

Las personas con piel normal, tienen balanceada su producción de sebo, por lo que su hidratación es la ideal, no suele tener exceso de brillo, tampoco es escamosa o seca. La piel normal tiene poros muy finos y probablemente no tan visibles, tienen buena circulación sanguínea, un tono de piel uniforme con pocas o ninguna imperfecciones y una textura suave y tersa. Básicamente, lo más cercano a la perfección en términos de cuidado de la piel. Los tipos de piel normales también requieren mucho menos mantenimiento en comparación con todos los demás. Se trata más de encontrar los productos correctos y apegarse a ellos porque tu piel no tiende a fluctuar demasiado. A diferencia de los tipos de piel sensible. O simplemente todos los demás en el mundo.


¿Piel madura?

El envejecimiento es un proceso natural del ser humano y es algo por lo que todos pasamos. Estamos envejeciendo ahora mismo, es algo inevitable por lo que también pasa nuestra piel. Para que puedas entender el envejecimiento de la piel, no es como si fueras viejo, pero día a día a partir de los 25 años empezamos a perder producción de colágeno y elasticidad en la piel. Simplemente dejamos de crear tanto de esa esencia juvenil de unicornio y es por eso que verás que comienzan a aparecer líneas finas, pero también la piel comienza a adelgazarse, pero también la producción de sebo disminuye un poco. Básicamente, solo necesita poner un poco más de énfasis para investigar los productos que deseas usar, como el retinol, que es vitamina A, así como refuerzos de colágeno y, obviamente, protector solar. Incluso si no tienes la piel madura, el protector solar siempre es diario. Normalmente, cuando nuestro rostro comienza a mostrar signos de envejecimiento y generalmente comienza justo aquí, alrededor de nuestros labios, simplemente no lo confundas con las líneas sonrientes. Y ahora hemos llegado a lo que estabas esperando, que es cómo puedo saber mi tipo de piel.




¿Cómo puedo saber mi tipo de piel?

Tengo dos métodos para ti. Si el primero no funciona, entonces tienes un plan de contingencia de respaldo.


Método 1: Prueba del papel secante

Así que el primer método es la prueba del papel secante. Lo que necesitarás es un espejo y papel secante. Si no tiene papel secante, puedes intentar usar pañuelos separados, papel de seda, servilletas o incluso papel pergamino. Entonces, lo que vas a hacer es lavarte la cara con tu limpiador habitual, secarte y seguir con tu día durante dos horas sin ningún producto de cuidado de la piel o maquillaje. Sí, es posible que sienta cierta incomodidad, pero ese es el punto. Luego, después de dos horas, te pararás frente al espejo con algunos papeles secantes a mano, tomarás los papeles secantes y colocarás uno en cada una de las siguientes áreas de tu cara: tu zona T, debajo de los ojos y las mejillas. Toma nota de dónde el papel secante absorbe la mayor cantidad de aceite, así como dónde se pega a la cara y dónde se cae. Así es como se ven los resultados.


Si miras todos los pequeños parches y está muy empapado, cada uno de ellos está empapado en aceite, entonces probablemente tengas una piel más grasosa. Y luego, si lo miras, y solo el área de la zona T tiene partes aceitosas y luego el resto de la cara y el área de las mejillas no son tan aceitosas, entonces probablemente tengas una combinación. Y luego, si todos los papeles secantes se cayeron al suelo y no hay mucho aceite, todavía habrá un poco porque todos lo necesitamos para funcionar. Probablemente sean pequeñas motas de aceite, no es un parche denso, probablemente tengas una piel seca y algo sensible. Oh, esta también es una buena prueba de cuán sensible eres porque si comienzas a tener manchas rojas solo por no hidratarte y todo eso, entonces probablemente sabrás que tienes sensibilidad porque las personas grasas simplemente se hidratarían.


Si sus papeles secantes los pegan por un tiempo y hay un poco allí y todos son algo uniformes, entonces probablemente tengas una piel normal. ¿Cuál tienes? Déjamelo saber en un comentario. Si todavía estás un poco confundido, podemos pasar al método 2, que es mirar y pellizcar.


Método 2: Mirar y pellizcar

Así que básicamente consigue un espejo y si tienes un espejo de doble aumento, no mires el lado ampliado, no te hagas eso a ti mismo, solo mira el lado normal y querrás ver dónde están sus poros. Si los poros están más dilatados y visibles, esto podría ser una señal de que tienes una piel más grasa, ya que el sebo sale y tiende a mostrarse más. Pero si estás mirando y estás como, no sé lo que estás diciendo, realmente no veo nada más que piel, entonces probablemente tengas la piel seca.


Si miras tu zona T, que es un área de la frente que va desde la nariz hasta el mentón, y ves algo de brillo reluciente y algunos poros visibles, pero el resto de tu cara está un poco seco como mate, entonces esto podría ser una señal de que tienes un tono de piel más bien mixta.


El segundo paso después de que te hayas mirado los poros es con los dedos índice y anular dar un pellizco en la cara, si pellizcas y encuentras que tu cara o la piel entre ellos todavía está bonita, tersa y firme, entonces probablemente tengas una piel mixta o normal o grasa. Pero si la pellizcas y ves como escamas secas o si se convierte en una especie de aspecto desmenuzable de la gente, entonces probablemente tengas la piel seca, observa también la duración del tiempo que lleva volver a bajar, si vuelve a su estado normal, entonces es muy firme, húmedo como bien hidratado y nutrido, pero si tarda un poco son los signos de piel seca y tal vez deshidratada. Así que no es tan difícil descifrar cuál es tu tipo de piel, ¿verdad?




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